jueves, 31 de marzo de 2011

La era de la prensa gratuita en internet se aproxima a su fin

El diario norteamericano The New York Times estableció el pasado 28 de marzo su versión online como un sitio de pago para los consumidores. Restringiendo, de esta forma, el acceso totalmente gratuito a su página web oficial.
Dicen que el que la sigue la consigue, pero no se sabe si esta vez será así, pues este diario ya puso en marcha la misma iniciativa cinco años atrás. Pero ahora la cosa es diferente, el diario neoyorkino intenta seguir los pasos del periódico The Wall Street Journal, medio de prensa escrita que actualmente se encuentra obteniendo beneficios con su web de pago.
Es obvio que los periódicos consideren incongruente cobrar por una información en papel, que se encuentra, exactamente igual, gratis en internet. En consecuencia, es lógico entender que los lectores no van a pagar por algo que pueden obtener a coste cero.
Originariamente la prensa escrita no se creó para regalar información, siempre ha sido de pago o por lo menos lo era hasta el nacimiento de internet. ¿Por qué ahora con las nuevas tecnologías han de ofrecernos gratis la información, si no lo habían hecho hasta el momento? Pues bien, la clave está en garantizar a los usuarios un periodismo de calidad, una información que los lectores estén dispuestos a consumir aunque tengan que pagar.
Si el nuevo intento del diario norteamericano sale bien, serán varios los periódicos que apuesten por esta medida e irán uno detrás de otro privatizando sus soportes digitales, hasta tal punto que la prensa escrita vuelva a ser en su totalidad de pago y recurriremos a la televisión para encontrar información gratuita, como se ha hecho toda la vida.
                     

miércoles, 23 de marzo de 2011

Los medios de comunicación se nutren de las desgracias ajenas

Los medios de comunicación son un elemento en constante evolución, sus cambios están ligados a las modificaciones sociales. El objetivo principal de estos debería ser informar objetivamente sobre aquellos acontecimientos que se consideren noticiosos, pero en los últimos años parece que no es así. La frivolidad y el sensacionalismo, con el que se tratan las informaciones, es cuanto menos preocupante. Cada vez son más las noticias “huecas” con las que nos invaden los medios de comunicación, el conflicto viene cuando esas noticias se nutren de desgracias ajenas.
La violencia de género es un tema muy recurrido por los informadores, pero mientras el número de víctimas sigue aumentando, los medios de comunicación parecen perdidos en una red sensacionalista donde, más que en el análisis y la información de este asunto, parecen centrarse en el simple morbo y en la crónica amarilla.


La prensa está mostrando su faz más carroñera en estos últimos años, ofrecen como gancho la sangre, las lágrimas, el dolor de otros. Así lo muestra el tratamiento del desastre sufrido en Japón –un terremoto de 9 grados en la escala de Richter-, desde Occidente ponemos el “Mundo patas arriba”, mientras el pueblo nipón no se auto-martiriza con una histeria informativa que no haría otra cosa que agravar la terrible situación que ya de por sí les ha tocado sufrir.

Debería ponerse fin a la venta y consumo de informaciones que impliquen sufrimiento, pero no, esto no interesa, las audiencias mandan y los medios se han dado cuenta de que el público demanda desgracias ajenas para olvidar las propias.